Erythrina americana Mill. Arbol perteneciente a la familia de las leguminosas que alcanza hasta 10 m de altura. Tallo con espinas, amarillento, y follaje frondoso. Tiene coloridos racimos de flores rojas, comestibles previo cocimiento, las cuales aparecen agrupadas en racimos terminales, en vainas delgadas parecidas a machetes en pequeño. Las flores son diperiantadas, con un cáliz corto, gamosépalo y persistente; la corola está formada por un estandarte angosto, dos alas y una quilla; el androceo tiene diez estambres: nueve en un grupo y el restante, aislado; y el gineceo está rodeado en su base por un nectáreo, y consta de un ovario alargado, comprimido, con estilo simple y estigma chico.
El fruto, parecido al ejote, es legumbre de cinco cm de largo por uno de ancho, con estrangulamientos que limitan los lóculos, donde están las semillas; éstas varían de dos a seis, y son de color rojo vivo, de 10–14 mm de diámetro, lisas y brillantes.
La madera es utilizada por ser ligera, blanda y fofa, amarilla con vetas morenas; se ocupa en la elaboración de máscaras, esculturas y todo tipo de efigies talladas con grados de laboriosidad. La corteza es de color rojo y amarillo, y contiene además una resina neutra y un alcaloide con propiedades narcóticas, por ello la semilla no es comestible.
El nombre “flor de pito” se le da porque, al proveerle aire con la boca, suena como ese instrumento musical. Son venenosas las semillas, la corteza y, en menor proporción, las flores, que sólo cocidas son comestibles. La flor del colorín, previa preparación rigurosa, se come frita con huevo o en torta (memelitas). Al hervirse y retirarles el agua se pueden capear con huevo y es un riquísimo manjar. El sabor de los colorines semeja el de la carne de res. En Guerrero se come en tortitas con caldillo, mole rojo, mole verde, y combinado en mole verde con huevos ahogados.
Con frecuencia se ven árboles de colorín en cercas vivas de huertos, para detener el alambre con que se circunda. El colorín, además de ser de ornato, proporciona sombra. De las semillas, parecidas al frijol, suelen hacerse sartas, formando vistosos collares y pulseras, que venden los indígenas como producto típico. También se le conoce con el nombre de tzompantli, pito, sumpante, gasparitos, esquelite, esquemile, cosquelite, cochoquelite, pispirique.
(JRV/KZPV/RFP