Velasco Piña, Antonio

Escritor. Nació el 8 de septiembre de 1935 en Buenavista de Cuéllar. Fueron sus padres Antonio Velasco Taboada, del mismo lugar, y María Teresa Piña y Palacios, del Distrito Federal.

Estudió primaria y secundaria en el Colegio Simón Bolívar, y la preparatoria en el Cristóbal Colón, en el D. F.

Asistió a la Facultad de Derecho de la UNAM. Formó parte de la Generación 1954.

En 1959, se graduó con la tesis Fuentes tributarias (proyecto de reformas fundamentales). Ha dictado conferencias en España (en la Universidad Marcelino Menéndez Pelayo) y en Los Ángeles, California.

Se dedicó a la investigación y a la docencia sobre cuestiones de carácter histórico y fiscal. Fue director general del Instituto Mexicano de Estudios Fiscales, y maestro de Ciencias Políticas y Sociales en la Universidad Iberoamericana.

En Tlacaélel rescata una figura de excepcionales dimensiones; se trata del auténtico forjador del Imperio Azteca, que supo infundir en los tenochcas la vocación de grandeza y el sentido de responsabilidad cósmica.

En Regina, 2 de octubre no se olvida, proporciona una diferente visión sobre el movimiento de 1968. Considera que los acontecimientos de ese año sacudieron al mundo entero, y tenían motivación de raigambre espiritual y no simplemente política. La obra se tradujo a varios idiomas, inclusive el japonés. En 2003 fue llevada al teatro como Regina, un musical para una nación que despierta, que protagonizó la cantante y actriz Lucero.

En octubre de 2002, el Gobierno del estado de Guerrero le otorgó la Condecoración Vicente Guerrero.

Ha publicado, con el pie de imprenta Grijalbo: Regina, 2 de octubre no se olvida (1987 y 2002); La herencia olmeca (1993 y 1997); Cartas a Elisabeth (1993 y 1997); Amor y destino en el palacio nacional (2003); editorial Jus dio a conocer: El despertar de Teotihuacan (1998); Tlacaélel, el azteca entre los aztecas (1997). En Madrid, EDAF editó: Hombres que quieren ser (2000); La guerra sagrada, una nueva visión sobre la guerra de independencia de México (2002). Y, con el sello de “Siembra Olmeca”, se imprimió: Espejo del viento, México, 1992.

(AND)