Aviador. Nació en Acapulco, Guerrero, en 1892; murió en la Ciudad de México el 23 de abril de 1919.
Trabajó como obrero fundidor en los talleres de la Escuela Militar de Aviación, en el D. F.; sobresalió por sus conocimientos mecánicos; llegó a ser, a los 23 años, maestro fundidor, mayordomo general. En febrero de 1916 fue jefe de la Sección de Fundición de los Talleres Nacionales de Construcción Aeronáutica.
Los talleres ferroviarios de Nonoalco lo apoyaron con el equipo para construir los hornos, donde el 15 de junio de 1916 se fundieron las primeras piezas de aluminio para el monoplano El Guajolote.
Se alistó en los Batallones Rojos. En enero de 1918, ingresa a la Escuela Militar de Aviación como alumno supernumerario; fue ascendido a cadete tres meses después, y a teniente piloto aviador, en mayo del mismo año.
Como oficial de la Fuerza Aérea Mexicana, participó en bombardeos a los zapatistas de la sierra de Puebla, San Pedro y Atlixco. Formó parte de la escuadrilla acrobática Amado Paniagua.
En el extinguido campo militar de Balbuena, al oriente de la Ciudad de México, se desintegró el avión A–45 que maniobraba, muriendo en esa acción.
(JRV)