Citrus grandis osbeck. Árbol de talla mediana, de 4 a 9 m de altura; de la familia de las Rutáceas; originaria de Malasia y del sureste de Asia. Hojas alternas ovales redondas, miden de 10 a 20 cm de largo. Flores blancas hermafroditas y solitarias o en grupos axilares de 2 a 2.5 cm de largo. El fruto es una baya (hesperidio) globosa, grande, de 10 a 15 cm de diámetro, aunque las hay de 45 cm o más; cáscara amarillo pálido, lisa; la pulpa es jugosa, ácida y con un ligero sabor amargo, formada por celdillas o vesículas grandes fácilmente separables de la pared de los gajos o compartimientos en que está dividido el fruto en su interior. Algunas variedades poseen semillas relativamente grandes de color blanco, otras carecen de ellas.
El sabor del fruto se ve influenciado por el tipo de terreno y la altitud; a mayor altura mayor acidez, de ahí que es preferible la fruta proveniente de las costas o de clima tropical.
Otra especie de toronja es Citrus pardisis Macf: más grande y robusta, con ramas y hojas lisas; los frutos se desarrollan en racimos; además de que las celdillas de la pulpa son más pequeñas.
Flor de toronjo.
El cultivo de la toronja es semejante al de la naranja; en Guerrero se le encuentra con mayor frecuencia en la zona Centro, y más bien a nivel casero. Como remedio, las hojas hervidas con un diente de ajo y unas hojas de limón son buenas contra la falta de apetito, contra la diarrea, el dolor de estómago y la gripe, además de parar el vómito.
(EA