Zingiber officinale Roscoe. Planta herbácea perenne, de hasta 60 cm de alto, con los tallos erectos, las hojas grandes, lanceoladas, envolventes, y flores amarillas en espigas terminales. Crece en suelos húmedos y sombreados de selvas lluviosas y pastizales; su cultivo se ha extendido en sembradíos y viveros; en el estado se le considera como planta de ornato y se puede encontrar en patios familiares o en el borde de algunos cultivos donde la humedad es alta. Es una planta originaria de Asia tropical, actualmente se encuentra en área de clima tropical, desde Malasia y China hasta la India, América del Sur y las Antillas, especialmente en Jamaica. De esta especie se aprovecha el rizoma, que se arranca cuando la planta tiene de 10 meses a un año de vida. De sus principios activos encontramos el aceite esencial con zingiberina, alcanfor, cíñelo, geranial y linalol, gingeroles, shogaoles, gingerenonas. Es un estimulante digestivo, antiemético, carminativo, colagogo, antitusivo, febrífugo, estimulante circulatorio, vasodilatador, hipolipemiante, hipoglucemiante, laxante, antiinflamatorio, antiséptico.
En la antigua India se consideraba que el jengibre (singabera) además de depurar el estómago limpiaba el espíritu y por ello se tomaba en lugar del ajo en las jornadas previas a las festividades religiosas, para así dulcificar el aliento. También es utilizado como especia y condimento en sopas, salsas, ensaladas y guisos; también para aromatizar galletas, bizcochos, panes e incluso bebidas, como el ginger ale inglés.
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