Se dice del adorno que usan las mujeres en la cabeza cuando lucen su traje típico de fiesta. Son las amuzgas las que tejen esa trenza de estambres de colores, colgando en cada extremo cinco o seis bolas cardadas del mismo estambre. Los atavíos regionales de Acatlán y los de las amuzgas los usan indistintamente, pero cabe aclarar que las indígenas no los usan, más bien las mestizas cuando se visten con ellos.
(FPM)