Tuvo su origen en Chicago, Illinois, EU, el 23 de febrero de 1905, al reunirse el abogado Paul P. Harris con Silvester Schiele (comerciante en carbón), Gustavo Loejr (ingeniero en minería) e Hiran Sholey (sastre). Fundaron el primer club de servicios, denominándolo Rotary, porque los socios se reunían rotativamente en los lugares de trabajo.
Los rotarios están reunidos principalmente por la amistad; además, los ligan sus negocios lícitos; y llegan a convertirse en la piedra angular del desarrollo de cualquier empresa digna. El objetivo general es estimular y fomentar el ideal de servicio, en el que se encuentran comprometidos un millón doscientos mil socios, esparcidos en 155 países.
En abril de 1921 llega a nuestro país el rotarismo. Se conoce la carta constitutiva como Club Rotario Ciudad de México; y a instancias de éste se fundaron clubes rotarios en Veracruz, Tampico, Monterrey, Guadalajara y Chihuahua. Fue el primer gobernador de esos clubes Nelson Rhoades, quien dio auge al rotarismo en México.
En Guerrero, el rotarismo se instala en 1936, a iniciativa del Club Rotario Cuernavaca; luego se funda el Club Rotario Acapulco, A. C., que preside Marcelino Miaja, y como secretario, Alfonso Gegil Méndez; lo integran 21 socios fundadores. Este último apadrina el surgimiento del Acapulco Icacos, A. C., y el Costa Azul, A. C. En septiembre de 1942 nace el Club Rotario Iguala, A. C., que apoya al Club Rotario de Taxco, A. C., el 18 de enero de 1945; y en años posteriores se crea el Club Rotario Valle de Iguala, A. C. En Taxco se constituye el Club Rotario de la Borda, A. C., el Club Activo 20–30 y el Club Rotario Monte de Piedad número 5.
En Tierra Caliente, el 9 de junio de 1970 se funda el Club Altamirano, A. C., y nace el Club Rotario de Coyuca de Catalán el 12 de septiembre de 1973. En Chilpancingo el Club Rotario se establece en abril de 1975. En la Costa Grande, el 29 de abril de 1976 surge el Club Rotario Zihuatanejo, A. C.
El rotarismo ha sido factor importante para promover el turismo mundial hacia nuestro país; en 1935 celebró la Convención Internacional Rotaria en la Ciudad de México, con la asistencia de más de siete mil rotarios de todo el mundo, cantidad que hizo insuficiente la infraestructura hotelera de ese entonces, teniéndose que utilizar el apoyo en casas particulares, y, de manera especial, el Gobierno federal instaló la llamada “ciudad pullman”, formada por un gran número de carros pullman estacionados en la terminal ferroviaria de Buenavista, donde los rotarios pernoctaron con comodidad. Con esto el turismo, o la “industria sin chimeneas”, dio un paso agigantado.
En el estado de Guerrero el rotarismo se ha distinguido por la obra social que realiza, y, de manera general, señalaremos que en Acapulco creó la Cruz Roja; fundó la Escuela Secundaria 2; estableció la primera guardería infantil; construyó la Biblioteca Pública Doctor Alfonso G. Alarcón; durante siete años organizó los carnavales en el puerto; apoyó a los damnificados del ciclón Tara, del poblado de Nuxco, ayudándoles en la edificación de la unidad habitacional Villa Rotaria. En Iguala, los rotarios promovieron la introducción del agua potable; efectuaron, durante 22 años, operaciones de rehabilitación a niños con secuelas de poliomelitis, además de donar aparatos ortopédicos. Apoyaron la construcción de la Preparatoria 24 de Febrero y de los jardines de niños Ángel Cáliz Antón, Aurora Mendiola, y Club Rotario. En el Hospital General de Salubridad, han colaborado con pagos de medicamentos, prótesis de cadera y clavos para personas de escasos recursos económicos.
En Taxco de Alarcón, a través del programa “Más agua para Taxco”, los rotarios han introducido el preciado líquido; construyeron las escuelas Mariano Bernal, Baltasar R. Leyva Mancilla y Nicolás Bravo, además de colaborar durante tres años consecutivos con la Preparatoria 4, dependiente de la UAG; crearon el fondo para la iglesia Santa Prisca; hicieron un puente en Santa Rosa; introdujeron el agua potable a los poblados de Tecalpulco, El Fraile, Dolores, Santa Rosa y Joyas del Progreso; ayudaron a que funcionara la delegación de la Cruz Roja y la primera estación de bomberos.
En Ciudad Altamirano los rotarios fundaron una biblioteca y una preparatoria. En Coyuca de Catalán, establecieron la escuela secundaria nocturna para trabajadores e instalaron la cancha de basquetbol y una antena repetidora local de Televisa.
Club Rotario de Ciudad Altamirano.
En Chilpancingo, participaron en la identificación y nomenclatura de las calles, así como en la construcción de los primeros paraderos para pasajeros; construyeron el Jardín de Niños Club Rotario y su parque infantil; consiguieron el equipamiento del gimnasio del CERESO; crearon el Centro de Salud de Acahuizotla, y equiparon al Cuerpo de Bomberos; emprendieron una campaña de detección de cáncer cervicouterino por colposcopia.
En Zihuatanejo, en 1990, donaron un predio y un edificio para el cuerpo de bomberos (que anteriormente funcionaba en la Academia de Policía). Las instalaciones, de manera oficial, se inauguraron en 1994.
Una de las actividades más importantes de los rotarios se desprende del Programa Polio–Plus, a través del cual se comprometen a proporcionar la vacuna antipoliomielítica necesaria al sector salud, con la finalidad de mantener erradicada esta enfermedad en el país.
(JRV)