Velázquez de León y Cárdenas, Joaquín

Abogado, matemático y minero. Nació el 12 de junio de 1732 en la hacienda minera de Acevedotla, que pertenecía a Sultepec (intendencia de México); murió el 7 de marzo de 1786 en la Ciudad de México. Fue hijo de Francisco Antonio Cárdenas Velázquez de León e Isabel Francisca Reynosa. Francisco Antonio se dedicaba, junto con su hermano Fernando Manuel, a la explotación minera.

Conviene decir que el régimen de intendencias se estableció en 1786, como resultado de la presencia de José de Gálvez, visitador general de la Nueva España (1761–1774). La intendencia de México correspondía entonces a lo que hoy son los territorios de Querétaro, Hidalgo, Morelos, Distrito Federal y parte de Guerrero. Hecha la Independencia, en 1824 se creó el estado de México, cuya capital era la ciudad del mismo nombre; en 1827 Texcoco es el lugar de mando; en junio de ese año lo fue San Agustín de las Cuevas (hoy Tlalpan), y en 1830, Toluca.

Al crearse el estado de Guerrero en 1849, el área de Acevedotla formó parte del municipio de Tetipac, distrito de Alarcón.

El general Héctor F. López Mena afirma en su Diccionario biográfico, geográfico, histórico y lingüístico del estado de Guerrero que el pequeño Joaquín, a los 4 años de edad, enfermó de viruela y contagió a su padre, quien murió de este mal.

El niño fue cuidado por su tío, el bachiller Carlos Celedonio Velázquez, vicerrector del Colegio Seminario de México y le asignó como tutor al indio Manuel Ascencio, que lo instruyó en historia y lenguas indígenas.

El joven sobrino fue inscrito en el Colegio Tridentino; allí estudió la carrera de Leyes. A los 22 años, ingresó al Colegio para Postgraduados de Santa María de Todos los Santos, donde, más tarde, es catedrático de Matemáticas y funda una academia de la materia.

También estudió química y metalurgia, física experimental, historia natural, sin olvidar las letras humanas, poesía y mitología.

El 13 de noviembre de 1765, fue electo catedrático de Astrología en la Real y Pontificia Universidad.

Conoció al joven Juan Lucas de Lassaga; se asociaron para trabajar en la explotación minera, estableciendo dos hornos de fundición. Propusieron al virrey De Croix un estudio para separar el oro de la plata de baja ley; el asunto llegó a manos de José de Gálvez, quien dispuso que se efectuara un experimento.

Lassaga, Velázquez de León y José de la Borda solicitaron que se redujera el precio del azogue (mercurio) que se empleaba en las labores mineras, logrando buenos resultados.

Del 5 de abril de 1768 al 11 de diciembre de 1770 acompaña al visitador general en su viaje a las Californias. Allí conoce a los astrónomos franceses Jean Chappe d’Auteroche y Jean Pauly, que trajeron instrumentos científicos importantes. Esta coyuntura hace que se ocupe del famoso tránsito de Venus por el disco del sol, el 3 de junio de 1769, hecho que lo llevó a redactar un extenso informe dirigido al virrey, aún inédito.

Al llegar Bucareli como nuevo virrey, Velázquez de León es comisionado para idear el arco triunfal de la recepción.

Después, denunció cuatro minas inundadas en Temascaltepec, en las que aplicó su metodología y maquinaria para desaguarlas y hacerlas productivas.

Se le comisiona para formar una carta geográfica de las provincias de Nueva Galicia, Nueva Vizcaya, Sinaloa, Sonora y California.

Alegando problemas de salud, renunció a su cátedra en la Real y Pontificia Universidad.

Se le encarga escribir la historia de las lagunas de México y se le pide opinión sobre el desagüe del valle.

Se dedica a la explotación de la minería. Se le nombra director general del Cuerpo de Minería, que ocupa de 1777 a 1786; modifica varios procesos de producción.

Colabora con noticias de meteorología en la recién fundada Gazeta de México. De 1780 a 1786, se hace cargo del Tribunal de Minería.

Entre sus trabajos pueden citarse: “Arco triunfal en la recepción del Marqués de Cruillas”; “Viaje a la Baja California” (1768–1770), donde describe los potenciales de la península; “Informe al Virrey Croix sobre las minas”, 1771; “Arco de triunfo del Virrey Bucareli”, 1771; “Representación a nombre de la minería”, 1774; “Las ordenanzas de minería”, 1778–1783; “La estirpe vespasiana”, 1784, en la recepción del virrey Matías de Gálvez; “El malacate en el desagüe de las minas”, en la Gazeta de México; “Sobre el desagüe de la Ciudad de México”; “Latitud y longitud de la Ciudad de México”; “Altitud y clima del valle de México”; “Fósiles y montañas. Terremotos. Lagunas”.

Cuando Alexander von Humboldt estuvo en México, del 22 de marzo de 1803 al 7 de marzo de 1804, conoció los trabajos de Joaquín Velázquez de León y los valoró en forma positiva.

Para celebrar el bicentenario de las Reales ordenanzas de minería, la Dirección General de Correos emitió el 21 de diciembre de 1983 un sello postal.

(AND)