Ochoa Campos, Humberto

Periodista y escritor. Nació el 10 de agosto de 1920 en Iguala; falleció en Zihuatanejo el 26 de noviembre de 1969; sus restos descansan en la capital del estado. Sus padres fueron Lorenzo Ochoa y Luz María Campos.

Busto de Humberto Ochoa Campos en Chilpancingo.

En Chilpancingo, estudió la escuela básica y el primer año de Normal; después se trasladó a la Ciudad de México. En 1938 el periódico El Nacional le publicó dos cuentos: El cantor popular y El cotón pinto. En 1945, colaboró en las oficinas de prensa del Lic. Miguel Alemán.

Vuelve a Chilpancingo y crea el semanario independiente El Güero Sol; en el mismo año, el 7 de julio de 1947, funda el Diario de Guerrero, primer rotativo de la entidad, por lo que recibió el diploma y la medalla “Al mérito ciudadano”; participaron en esta empresa Aarón M. Flores, Roberto García Infante, Daniel Ramos, José Rubín, Moisés Reyes Parra, Lamberto Cervantes, Genaro Mendoza, Rubén Mora Chino y Amando Salmerón.

Posteriormente, en el D. F., entre los años 1956–1960, dirige el semanario Provincia que circuló como suplemento dominical de doce periódicos del sur y sureste del país. También en la Ciudad de México, integró el Círculo Social Guerrerense, dentro del cual surgió la cooperativa de escritores Ignacio Manuel Altamirano.

Durante ocho años, presidió la Asociación de Pequeños Diarios.

Además del periodismo, se dedicó a la literatura. Publicó tres novelas cortas, reunidas en el volumen Al fin mundo ahí te quedas (1960) (Biografía de una pistola, Aún me parece poco, y El pueblo en la cuneta); Un subdesarrollado (obra de teatro escolar); Tres campanas (1961); El tigre emplumado (1962); La mensa (1964); Lienzo en blanco (1964); El brazo derecho (biografía de Hermenegildo Galeana, 1967); “¿Cooperativismo o comunismo?” (ensayos); y Los medieros (1989).

En sus últimos años, radicó en Zihuatanejo. Desde allí, enviaba a Novedades de Acapulco su columna “Zihuatanejo S.O.S.” y hace su refugio de escritores que después nombró “Astilleros de papel”, para dar albergue a “los pescadores de ideas”.

También en este puerto dejó un folleto mimeografiado titulado Marejadas de otoño, obra con la cual se nutrió el programa radiofónico “Rimas frente al mar” de la XEUQ, Radio Zihuatanejo.

Muere en 1969 de un ataque al corazón; su cuerpo fue trasladado a Chilpancingo y sepultado junto a la tumba de su esposa.

(HCB)